
MALECÓN TURÍSTICO MIRAMAR
En un extremo del Malecón Turístico Miramar se encuentra localizada la estructura que recuerda a Tomasita, quien, según la leyenda, fue devorada por un caimán. Ocurrió un 20 de enero, día de San Sebastián, cuando una joven madre, de apellido Bojato, junto con sus hijas, se fue a lavar al caño e´Loro, lugar donde tenía su hábitat un enorme caimán. A pesar de las recomendaciones que le hizo la madre a la hermana mayor, de cuidar a Tomasita, en un descuido, el caimán se la llevó. Su madre al enterarse, desconsolada, empezó a gritar: «A que santo Clamaré para salvar a mi hijita si a San Juan Evangelista o al patrono San José».